Una actividad muy importante a desarrollar durante los primeros días de clase es destinar un tiempo prudente para “ablandar las manos” de los niños y de las niñas. Para ello les proponemos una serie de actividades que buscan afianzar y potenciar la grafomotricidad de nuestros alumnos y alumnas, siempre pensando que luego ellos deberán escribir dentro de un renglón de una manera armónica, prolija, legible y uniforme.
La grafomotricidad se debe ejercitar previamente a la escritura, ya que es el camino que conducirá a los alumnos y a las alumnas a apropiarse de aquellos movimientos que deberán realizar para una correcta direccionalidad y trazado de letras.
Las actividades que incluye este material están secuenciadas según el nivel de complejidad del trazo a ejercitar: vertical, horizontal, oblicuo, ondulatorio, semicírculo, bucle, espiral, enlaces y, por último, las letras.