Una cuestión central en Segundo Ciclo es la necesidad de involucrar a los estudiantes en el proceso de estudio de esta disciplina. Se espera poder generar más espacios que permitan a los estudiantes reorganizar su trabajo, volver sobre lo realizado, clasificar y reordenar los problemas, establecer relaciones entre lo viejo y lo nuevo, entre diferentes conocimientos puestos en juego. Los estudiantes también tienen que aprender, en la escuela, a estudiar autónomamente. Esto implicará que resuelvan problemas similares a los realizados en el aula, que tengan guías de estudio, problemas para resolver y entregar en un tiempo determinado, que puedan registrar avances y dudas, que puedan identificar los problemas que más les han costado y aquellos en los que más han avanzado. El estudio requiere de un trabajo comprometido y sistemático de los estudiantes que deberá ser enseñado, sostenido y propiciado por parte de los docentes. Enseñar a estudiar matemática es parte de la responsabilidad de la escuela.